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La enfermedad del coronavirus (COVID-19) es una afección respiratoria que se puede propagar de persona a persona. Tiene una tasa de propagación muy alta, lo que ha llevado a que colapsen los sistemas de salud de diferentes países. Por este motivo muchos gobiernos han decidido tomar medidas contundentes, como cerrar fronteras, limitar la entrada de extranjeros, e incluso decretar estado de excepción y toque de queda.

Sí, es comprensible sentir miedo. No solo por el riesgo a contraer la enfermedad, sino también por los cambios en la rutina, por la inestabilidad financiera, por el encierro forzado, por la escasez en víveres  y la incertidumbre en general. Pero vivir en miedo genera más angustia, frustración, tristeza, ira, agotamiento y retraimiento. Incluso baja nuestras defensas, haciéndonos mas susceptibles a enfermar.

Esta mañana le pregunté a mis ángeles, ¿Qué hacer para no sucumbir ante el miedo y afrontar el COVID19 con resiliencia?  (La resiliencia es la capacidad de las personas para enfrentarse a las adversidades y aceptarlas, buscando soluciones y nuevos caminos para salir fortalecidos de ellas.)

Aquí te comparto sus respuestas:

  1. Fe. La fe es la confianza y la seguridad que nos da Dios y sus ángeles. Recuerda que el universo es perfecto. No hay accidentes ni coincidencias. Todo pasa para algo y siempre estaremos a salvo pues Dios – Universo- La Fuente (como quieras llamarlo) nos sustenta. Confía en que todo estará bien y esto también pasará.
  2. No te enfoques en el problema sino en la enseñanza. Pregúntate, ¿qué he aprendido de esta situación? De las cosas que he aprendido de los ángeles es que de los momentos más retadores o «difíciles» se desprende lo mejor de la humanidad. Estamos en un mundo de contrastes, donde en algunas ocasiones necesitamos transitar por la oscuridad para poder apreciar la Luz que hay en nosotros o en las personas que nos rodean.
  3. En la «enfermedad» está la sanación. No se refieren exclusivamente a la sanación física. Es una oportunidad para sanar nuestras mentes, nuestras emociones y nuestros juicios. Es una oportunidad para que perdonemos, agradezcamos y valoremos la vida: cuando enfermamos, apreciamos la salud; cuando alguien trasciende, apreciamos la vida; cuando me veo obligado a permanecer en casa, valoro la libertad; cuando me aíslan, valoro la sociedad; cuando siento escasez, valoro la abundancia.
  4. Momento de reflexionar, meditar y sintonizar con nuestros ángeles. Casi siempre nos acordamos de Dios cuando estamos pasando por un mal momento. Así que esta es una gran oportunidad para orar, meditar, reflexionar o iniciar una relación más estrecha con nuestros ángeles o con nuestra intuición. Piénsalo, el tiempo que te ahorras de atasco para ir de un lugar a otro, lo puedes aprovechar para ti. Esta demostrado científicamente que el meditar reduce el estrés, te ayuda a pensar con mayor claridad y a ser consciente de lo que haces, piensas y dices. Y si a esto le sumas sentir/escuchar con mayor claridad la guía de tus ángeles, te sentirás en paz.
  5. Oportunidad para hacer cosas diferentes. Salir de la rutina nos da la opción de experimentar nuevas cosas, de reconocernos en áreas que no habríamos experimentado si hubiéramos seguido con nuestra vida normal.
  6. Sentido del humor. Cada vez que reímos nuestra energía fluye y sube nuestra vibra. Disfrutamos de la vida y tenemos la capacidad de gozar cada instante.
  7. Actitud positiva. Donde pones tu atención, pones tu energía. La vida es hermosa y solo tu decides cómo si la quieres vivir.

De corazón espero que estos consejos angelicales te ayuden en esta época y puedas sacar el lado positivo al COVID-19. Comparte tus inquietudes o comentarios al respecto!

Abrazos

Adriana Sierra Serrano