Los ángeles me han enseñado que cuando sentimos mucho dolor en nuestro corazón, ya sea por un duelo, el rompimiento con la pareja, la discusión con un amigo, o cualquier otra situación que te genera mucha tristeza y sientes «que se te rompió el corazón» nuestro chakra del corazón se desestabiliza y empieza a bloquearse. Haz de cuenta que cierras la puerta a tu corazón.
Inconscientemente creemos que así nos protegemos y evitamos el dolor, pero producimos el efecto contrario, pues al cortar el fluir natural de la energía nos empezamos a «marchitar» y la tristeza se apodera de nosotros haciendo que poco a poco nos desconectemos de la chispa de la vida.
¿Qué hacer en estas situaciones dolorosas? como nuestro chakra del corazón esta contraído debemos procurar actividades y pensamientos que lo expandan. Una manera es elevando nuestro amor propio, sin embargo cuando estamos pasando por este tipo de situaciones nuestra autoestima se desploma y queremos hacer de todo menos fijarnos en nosotros mismo. Por esto, hay una segunda manera que ayuda enormemente a elevar la vibra de tu corazón. Esta es la del servio a los demás. Cuando damos a otros, nuestro corazón se expande y nos sentimos genial. Es decir, abrimos la puerta de nuestro corazón y dejamos salir la luz y el amor que llevamos dentro.
Para servir al prójimo puedes hacer varias cosas, desde orar por ellos, enviarles bendiciones, participar en fundaciones, brindar tu compañía, llevar mercados, dar un consejo amoroso, invitar a un helado… en fin! hay muchas maneras que puedes explorar.
Recuerda mantener siempre tu corazón abierto, es la luz que puede estar necesitando alguien para salir de la oscuridad, y ayudará a que tu también salgas adelante.
Muchas bendiciones,
Adriana 
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