¡Y se pasó la tan anhelada Navidad en un abrir y cerrar de ojos! ahora todos nos estamos alistando para despedir el año 2016, pero ¿estas listo para recibir la energía que nos trae el 2017?
El 2016 se caracterizó por ser un año de cierre de ciclos. Todos los asuntos que teníamos pendientes se precipitaron haciendo que de una vez por todas los aprendiéramos a sobrellevar o a finalizar. Es por esto que para muchos el 2016 fue un año duro, con muchas cargas emocionales e incertidumbres. Fue un año donde seguramente tuviste que tomar decisiones que marcarían un nuevo camino en tu vida, ya fuera en la parte laboral o personal. Así que la energía del 2016 fue una energía pesada, con muchos movimientos y acontecimientos importantes no solo a nivel personal sino también mundial. Por lo anterior es comprensible que más de uno quiera despedir de una vez por todas el año 2016 con el anhelo de tener un 2017 sin tanto ajetreo.
Antes de tomarte la champagna y comerte las 12 uvas para los deseos del 2017, te aconsejo que liberes el 2016 en amor para que le des espacio a la energía de lo que deseas manifestar en el nuevo año. Solo necesitas un momento para realizar un pequeño ritual de despedida del 2016:
En un lugar donde no vayas a ser interrumpido, crea un ambiente agradable (prende una vela, incienso, música tranquila). Respira profundo tres veces y llama a tus ángeles de la guarda, al Arcángel Miguel y demás guías espirituales que te acompañen. Pídeles que te ayuden a revisar lo que fue el año 2016 para todos los aspectos de tu vida. Luego contesta las siguientes preguntas en una hoja de papel:
1. ¿Qué hiciste en el 2016 que te haga sentir orgulloso? No todo fue negativo en el 2016. Seguramente tuviste momentos agradables, conociste personas nuevas, visitaste nuevos lugares, tomaste decisiones que te dieron felicidad, descubriste un nuevo don o habilidad que desconocías tener, iniciaste un proceso espiritual, terminaste una relación en desequilibrio, etc. Es importante reconocer nuestros logros. Si tu no valoras quien eres, ni lo que haces, nadie más lo hará. Cuando nos sentimos orgullosos de nosotros mismos, elevamos nuestra energía, y podemos manifestar mucho más fácil nuestros sueños.
2. ¿Qué aprendizajes tuviste en el 2016? Depronto tomaste decisiones que te llevaron a tener una experiencia dolorosa o no muy grata. Los «errores» que cometemos son en realidad aprendizajes para nuestra vida y es importante que analices cuáles fueron para que no los vuelvas a repetir. Acuérdate que TODO son experiencias que nos acercan a nuestra esencia, pues nos dan una mayor conciencia de quien somos.
3. ¿Qué (o quien) estoy dispuesto a liberar que no me deja avanzar? Para el 2017 no te conviene seguir llevando cargas que no te corresponden. Acuérdate que cada alma debe aprender por si mima, y por más que queramos facilitar las cosas a los demás, cada quien debe asumir lo que le corresponde.
En este punto también es importante que examines tus emociones: ¿Para qué seguir cargando con el dolor, el resentimiento, vergüenza o rabia del pasado? ya es hora de liberarlos! créeme, al único que haces daño con esas emociones es a ti mismo. Perdonar no significa olvidar. Perdonar es darte la oportunidad de sentirte libre y en paz. Así que perdona a los demás y perdónate a ti mismo, todos hacemos lo mejor que podemos.
Por último revisa que ideas tienes de ti mismo. La única persona que nos limita somos nosotros mismos. Muchas veces dejamos de hacer lo que nos gusta porque no nos creemos capaces. Así que confía en ti. Tienes todo lo que necesitas para ser feliz.
Por último agradece todo el 2016. Fue un año que te ayudó a tomar más conciencia de tu vida.
Puedes quemar las hojas que empleaste para contestar las preguntas. Especialmente te sugiero quemar lo relativo a la pregunta tres.
Si tienes dudas me puedes escribir a yosoy@adrianasierraserrano.com
Bendiciones
Adriana
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