La sanación energética con cristales y ángeles es como una «patada cósmica», pues limpia, fortalece y renueva tu energía. Nuestro campo energético consta de muchas fibras de información energéticas que se conectan a través de un gran canal de luz que atraviesa nuestro cuerpo de la cabeza a los pies, recorriendo todos los chakras. Este tubo se alimenta de la energía Divina y la energía de la Madre Tierra. Cuando tenemos nuestro campo energético fluyendo en armonía nos sentimos perfectos, en equilibrio, con energía de sobra, y, con nuestra frecuencia vibratoria es alta. Así atraemos a nuestra vida todo aquello que necesitamos para que todo nos fluya y nos sintamos plenos.

Pero, en nuestro día a día nos tensionamos creando bloqueos en nuestra energía. Los bloqueos energéticos se pueden generar por muchos motivos. Por ejemplo, cuando una persona pasa por un dolor muy grande, como la partida de un ser querido o la ruptura de una relación de pareja, es probable que genere un bloqueo en el centro energético del corazón.
Los bloqueos también se crean por creencias limitantes (maneras de pensar que nos enseñaron o hemos adquirido de adultos).
Adicionalmente, situaciones generales del día a día, como los trancones, el estrés del trabajo, la mala relación con el jefe, las peleas con los hijos, etc. van produciendo en tu energía cargas que se van acumulando y producen bloqueos. Si no se liberan con el tiempo te puedes sentir con cansancio permanente, irritabilidad, insomnio e incluso puedes enfermar.

El ideal es mantener nuestra energía vibrando alto constantemente. Esto lo logramos con pensamientos positivos, agradeciendo diariamente, con baños de hierbas o flores, haciendo actividades que nos apasionan y con una sesión de sanación energética.